Interes-Antes. Tu blog de "actualidad".: DEPORTISTAS LEGENDARIOS (CAPITULO 1): GEORGE BEST (FUTBOL).

El loco, el excéntrico, avidez de gol, el de las jugadas imposibles e impecables, leyenda en el campo, irresponsabilidad fuera del mismo, estrella de márketing, la gloria y la tragedia, genialidad e inconsciencia a partes iguales, el ying y el yang, el quinto beatle al servicio del espectáculo, el campeón del mundo.....de sueños rotos; hoy en nuestra sección deportiva, dedicamos nuestro tiempo al desaparecido futbolista irlandés George Best.

Aunque a lo largo de su carrera llegó a pasar por once clubs distintos, fue en el Manchester United, desde 1963 hasta 1974, donde obtuvo mayores éxitos.

Tuvo la fortuna de encontrarse en su debut en el Manchester con Sir Bobby Charlton, a la postre una de las grandes leyendas tanto del equipo como de la selección inglesa, Charlton, uno de los supervivientes de la tragedia del Manchester en el aeropuerto de Munich en 1958, habia conseguido con aquél equipo ser dos veces campeón de la Premier League (en 1956 y 1957) y ahora después de la reconstrucción del mismo, la situación era muy distinta y Charlton, esta vez con ayuda del joven Best, tenía la "obligación" de volver a llevar al Manchester a lo más alto.

En la temporada anterior a aterrizar Best en el equipo inglés, el curso 1962-1963, los "diablos rojos", habían logrado la F.A. Cup (Copa de Inglaterra) al imponerse por 3-1 al Leicester City. Pero en la Premier League la historia fue radicalmente contraria ya que finalizaron en el puesto 19º, estando a punto de descender.

En esas circunstancias se afrontaba la temporada 1963-1964, un año en el que si bien no se consiguieron títulos, la imagen del equipo mejoró muchísimo, hasta tal punto que quedó finalmente situado en la 2ª posición en el campeonato inglés, sólo superado por el Liverpool, en ese año Best anotó sus 4 primeros goles en liga.

A partir de ahi, empezó tanto para Best como para el Manchester United, una existosa racha de títulos y buen juego que se inició con la consecución de la Premier League y la Charity Shield (Supercopa de Inglaterra) en 1965 (título que volvería a conquistar en 1967), un nuevo titulo de la Premier en 1967 y el más importante, la Copa de Europa de 1968 venciendo por 4-1 al Benfica de Portugal, para cerrar ese año de 1968, además George Best consiguió el Balón de Oro y el Trofeo Pichichi en la liga inglesa, compartido con Ron Davies, delantero del Southampton; en la competición doméstica lograron el 2º puesto al quedarse a sólo dos puntos del Manchester City.

George Best y sus compañeros con la Copa
de Europa lograda ante el Benfica, en 1968.

A partir de 1969, el dominio del United empezó a brillar por su ausencia hasta la marcha del club de Best a finales de la temporada 1973-1974, año en el que se consumó el descenso de categoría.

Las dos siguientes temporadas, repartidas entre el Dunstable Town, el Stockport County y el Cork Celtic, fueron bastante pobres a nivel individual y optó para la temporada 1976-1977 por marcharse a Estados Unidos, a la Major League Soccer, en 23 partidos anotó 15 goles. Sin finalizar la temporada, fichó por el Fulham, donde en las siguientes dos temporadas marcó 8 goles.

En su retorno a Estados Unidos en 1978, entre sus partidos con Los Ángeles Aztecs, los Fort Lauderdale Strikers y los San José Eartquakes, anotó 30 goles hasta 1981.

Después, tras su paso por el Hibernian escocés, el Bournemouth y el Brisbane Lions, y tras un total de 204 goles, 137 de ellos con el Manchester United y 9 goles con su selección, la de Irlanda del Norte, en 1984 y a la edad de 37 años George Best, decidió retirarse del fútbol.

Después de su actividad deportiva, continuo evidenciando sus problemas con el alcohol, habiéndose sometido a numerosas terapias para superar su adicción, fue un jugador que vivió al límite tanto dentro como fuera del campo y maltrató su salud hasta el día de su muerte, acaecida el día 3 de noviembre de 2005, cuando una hemorragia interna acabó con su vida.

En sus últimos días, aceptó fotografiarse para varios periódicos sensacionalistas, postrado en su cama y con la siguiente frase "don't die like me" (no muera como yo), advirtiendo de los peligros que conllevaría seguir sus mismos pasos en este sentido.

Voy a abstenerme de publicar dicha imagen, dado que no es esa la imagen que nos debe quedar de George Best, y si la de uno de los principales referentes del fútbol mundial, no en vano, fue elegido 11º mejor jugador europeo de todos los tiempos, y el 16º mejor jugador del siglo XX, una trayectoria excepcional para un jugador excepcional.